
En una reunión de chicos y chicas, preguntaron a un chico: “¿Tú amas a esta chica?” Él respondió:
“¿A cuál?” Es evidente que no podemos amar lo que no conocemos. Es lo que pasa también en nuestra religión católica: titubeamos en nuestra opción por Cristo porque no lo amamos suficientemente, y no lo amamos porque no lo conocemos todo lo que podríamos.
Cada vez me convenzo más de que si no se le ama (a Cristo), es porque no se le conoce. A cada paso mi corazón se desgarra de dolor y el alma se queda fría al ver la iniquidad y el pecado en que están metidos todos los mortales. También los cristianos, o por lo menos, muchos de ellos. ¡Jesucristo no es conocido! Su doctrina en muchos casos es letra muerta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
ES IMPORTANTE PARA MI QUE APORTES TU OPINION, COMENTA QUE ESO AYUDARA A MEJORAR ESTE ESPACIO... GRACIAS